
- Raciones: 4 a 5
- Tiempo de preparación: 15 minutes
- Tiempo de cocción: 30 minutes
Bacalao con Patatas
Esta receta está inspirada en el marmitako de bonito del chef Luis Mokoroa, es un plato de la cocina tradicional vasca que consiste en un guiso de pimientos, patatas, cebolla y tomate, con el pescado como protagonista principal.
El bacalao es uno de los pescados que más nos gustan, suelo cocinar este guiso con frecuencia porque es de lo más sabroso y gratificante en días fríos en los que se apetecen platos de cuchara.
Como todo en la cocina, en el resultado final de una preparación influye mucho la calidad de los ingredientes. Es fácil conseguir un buen bacalao fresco o congelado al punto de sal, de no ser así también lo tenemos en salazón (seco) aunque a mí me gusta menos; eso de tener que desalar el bacalao uno o dos días para que esté en su punto, me da mucha pereza, no me gusta nada tanto remojo y la carne la siento con una textura algo fibrosa.
Este guiso es muy agradecido, con muy poco trabajo el resultado es extraordinario, con seguridad lo repetirás. Prueba también a elaborarlo con atún, bonito o salmón frescos, a cual más de sabroso.
Ingredientes
- Lomos de Bacalao - 800 gr fresco, descongelado o desalado
- Patatas - 1 Kg
- Caldo de pescado - 1 Litro
- Pimiento verde - 2 medianos
- Cebolla - 1 mediana
- Ajo - 2 dientes
- Tomate triturado - 4 cucharadas
- Pimentón dulce o páprika - 1 cucharadita
- Pulpa de Pimiento Choricero - 1 cucharadita (opcional)
- Guindilla - Una (opcional)
- Vino blanco - 3/4 de un vaso
- Hoja de laurel - Una
- Sal y pimienta - Al gusto
- Aceite de Oliva Virgen Extra - El necesario
Instrucciones
Lavamos, secamos y retiramos tallo y semillas de los pimientos. Picamos muy fino el ajo, cebolla y pimientos en trocitos pequeños. Ponemos a fuego suave una cazuela grande con un chorretón de aceite de oliva y añadimos las verduras a que sofrían.
Mientras tanto pelamos las patatas y las chascamos en trozos (metemos la hoja del cuchillo en la patata y tiramos, al romperse y no cortarse conseguimos que suelten el almidón en el guiso y que al cocer, las puntas se desbaraten y la salsa espese más).
Esperamos unos minutos a que ablanden un poco las verduras (sin que doren) y añadimos el tomate, dejamos que se rehogue y cuando esté listo ponemos pimentón y pimiento choricero, damos unas vueltas y agregamos las patatas, sazonamos con sal y pimienta (cuidado con la sal, no nos pasemos ya que dependiendo del bacalao y del caldo de pescado que utilicemos, podrían tener sal suficiente). Revolvemos bien y añadimos el vino blanco, dejamos que se cocine unos minutos para que se evapore el alcohol, entonces echamos la hoja de laurel, damos unas vueltas y le vaciamos el caldo de pescado hasta cubrir un dedo encima de las patatas más o menos. Si es necesario más adelante añadiremos caldo, pero si nos pasamos ¡más adelante no podremos quitarle caldo! y quedará muy simplón el guiso. Subimos el fuego y cuando el caldo empiece a hervir, bajamos a fuego suave, ponemos la tapadera y dejamos el tiempo necesario a que las patatas se cuezan.
Si queremos darle un poco de alegría al plato, añadimos la guindilla entera, si el picante no nos gusta, podemos omitirla.
Mientras tanto, limpiamos bien el pescado, revisamos que no tenga espinas y cortamos en trozos similares al tamaño de las patatas. Yo le quito la piel. Reservamos.
Dependiendo del tipo de patata tardarán en cocerse 20 a 25 minutos, para saber si ya están suaves pinchamos con la punta de un cuchillo un trozo de patata y entonces rectificamos sal y pimienta. Si consideramos que el caldo está un poco flojo, retiramos a un plato unos trozos de patata, apachurramos con un tenedor y regresamos a la cazuela, debe quedarnos con cuerpo, espesito. Subimos el fuego hasta que empiece a hervir nuevamente y en ese momento añadimos los trozos de bacalao. Apagamos el fuego y tapamos, con el calor residual será suficiente para que el bacalao quede en su punto y no se desbarate. Esperamos unos 5 a 10 minutos y servimos acompañado de pan. ¡Buen provecho!
Sugerencias: Podemos pasar por aceite caliente los lomos de bacalao, retirar y cortar en trozos, queda más sabroso aunque con más calorías. En este caso es lo primero que haríamos, reservamos el bacalao en un plato y en la misma sartén con el aceite que sobró, freímos las verduras. Los pasos siguientes de la receta son los mismos.
Este es el típico plato que recalentado está buenísimo, pero tendremos que cuidar que el pescado no se pase y desbarate porque no queremos una sopa con trozos de patata. Así que lo pondremos a calentar y en el momento en que suelte el hervor esperamos a que alcance la temperatura deseada y sin revolver bruscamente servimos con cuidado. O como dice una amiga: "por algo se inventó el microondas" pero cuidado no se pase, el micro es engañoso.