- Raciones: 6
- Tiempo de preparación: 15 minutes
- Tiempo de cocción: 40 minutes
Rosegones
Son unas galletas típicas valencianas cuyo nombre deriva de rosegó (en valenciano rosegar, en castellano roer), su principal característica es la consistencia dura. Se hornea una especie de galleta alargada que en cuanto empieza a coger color se corta en rebanadas y se vuelve a introducir por dos veces más al horno, 5 a 10 minutos de cada lado. Esto es lo que hace que sequen y quede una sabrosa galleta crujiente.
Son ideales para remojar en leche, chocolate o café y son muy, pero muy adictivas.
Su elaboración es muy parecida a los Carquiñoles de Cataluña o a los Biscotti o Cantuccini de Italia. Todos se hacen a base de almendra, harina, azúcar y huevo, se presentan como galletas alargadas del espesor de un dedo. Yo pienso que tienen los mismos orígenes y tal vez lo que cambie es el tamaño y la creatividad del cocinero en cuanto a sabor y aroma. Admiten ralladura de cítricos, algún tipo de alcohol e incluso chocolate o variedad de frutos secos.
Ingredientes
- Harina de trigo - 150gr
- Azúcar granulada - 100 gr
- Almendra - 100 gr (cruda y con piel)
- Huevo - 1 grande
- Licor - 2 cucharadas (brandy, cognac o vermouth)
- Polvo de hornear (Baking powder) - 1 cucharada
- Esencia de vainilla o ralladura de limón o de naranja - 1 cucharadita
- Yema de huevo - 1 para barnizar
Instrucciones
- En un cuenco grande mezclamos harina y polvo de hornear. Hacemos un hueco en el centro y en este colocamos azúcar, huevo y ralladura de limón o el sabor que se haya elegido.
- Con un tenedor vamos removiendo e integrando todos los ingredientes, poco a poco agregamos el licor y seguimos removiendo con el tenedor y después con los dedos.
- Amasamos hasta que todo esté bien integrado.
- Ahora extendemos la masa con las manos y sobre esta ponemos las almendras crudas. Mezclamos con paciencia hasta que estén bien distribuidas, formamos un rulo largo y no muy grueso, no hay que olvidar que en el horno aumentará su tamaño por la levadura.
- Colocamos sobre una bandeja de horno que previamente habremos cubierto con papel sulfurizado y con la palma de la mano presionamos para que el rulo quede u poco aplanado.
- Ahora, con un tenedor batimos ligeramente la yema de huevo y una cucharada de agua fría, pincelamos el rulo en toda su superficie con esta mezcla.
- Llevamos a horno precalentado a 180ºC hasta que empiece a dorar. En ese momento retiramos del fuego y con un cuchillo bien afilado cortamos las galletas en diagonal del grueso de un dedo más o menos. El truco para que no se desmorone y las almendras se corten bien es que debe estar la masa caliente y que debemos dar golpes secos y rápidos con el cuchillo.
- Ya cortado, acomodamos las galletas de lado y volvemos a meter por 5 minutos al horno, después, retiramos del horno la bandeja y volteamos las galletas del otro lado por otros 5 minutos más.
Pasado este tiempo, aunque las sientas suaves, las retiras y pones a enfriar en una rejilla, al enfriar es cuando cogen la consistencia dura del Rosegón.